Inspirada por su Palabra – Hna. Deborah Negron
May 24, 2023
La mujer adultera estaba siendo acosada. Le habían encontrado en su acto de adulterio. La ley decía que tenia que morir. Los hombres la acusaban. Y de seguro pudieron ser ellos que también usaron su cuerpo y se aprovecharon de su debilidad.
Cuando se la llevaron a Jesús el la miró. El consideró su estado. El no miró solo su reputación. Ni miró cuan horrible quizás se veía. Cuan desgastada la tenia el pecado no llamo la atención de Jesús.
El miró su corazón.
El entendió que el pecado trae ceguedad espiritual. Hace necio al inteligente. El pecado deforma el carácter del noble y destruye su vida.
Jesus le miró con amor. Con misericordia y con el poder para sanar su entorno.
Solo Jesús podía sanarle de adentro hacia afuera.
Solo Jesús podía hacer de una persona que malgasto su vida, una persona sana y en su mente cabal.
El trajo alineamiento mental. El trajo un nuevo comienzo para esta mujer. (S. JUAN 7:53-8:11)
Donde están los que te acusan, yo tampoco te condeno, Ve y no peques más.
Jesús le devolvió su derecho de decidir. El le devolvió su dignidad de persona. Su pecado ya no la iba a definir. Ya Jesus la libero de todo lo antes cometido. Si, esto fue en el Nuevo Testamento y no en el Antiguo Testimonio.
Pero que me dicen de El Rey David.
El Rey David creció en poder. No solo desafio y mato a Goliat. No solo llego a ser rey después que el rey Saul le había perseguido y peleado contra el. Aun Dios le entrego a David en sus manos a Saul, y le probo su carácter.
David no toco al ungido de Jehová. El fue un hombre recto. (1 Samuel 24:1-12)
Mas llego el día en que, como todo ser humano, David fallo. En ves de irse a la guerra se quedo en su palacio. Desde allí vio a Betseba. Desde allí su corazón peco. Pensó su mente en hacer el mal. Y con su cuerpo ejecuto su pecado. Envio por la mujer de Urias. La tomo como su posesión. Adúltero con ella. Y aun mando a matar a su esposo Urias. Que horrible son los pecados! Cambian a un hombre noble y honesto y sabio, en un marioneta de satanas.
El orgullo de David, y su posición de rey le hizo olvidar de su privilegio y su alianza con su Dios. Ese día ganó su carne sobre su carácter. Le vencieron los deseos de la carne y se olvido de su comunión con Dios. (2 Samuel 11).
No crea, que no le puede pasar a usted. Todos somos capaces de pecar contra Dios. No somos exemptos.
Tenemos una propensidad para pecar. La carne es débil. La mujer adultera de seguro no decía cuando joven, “Cuando llegue a grande sere una prostituta.”
De seguro, David no se propuso, “Hoy voy a pecar contra Dios.”
Claro que no. Pero en un momento u otro nos podemos descuidar.
Nuestra mente tiene que ser renovada todos los días.
Todo depende de nuestra diaria comunion con Dios. Nuestra vida espiritual es una vida. Se tiene que alimentar con el pan de la Palabra. Se tiene que estar de día a día en oración y devoción al Señor. Buscando agradarle en todo debería ser nuestro deseo y una vida dedicada y humillada al Señor podrá levantarse y permanecer en el día malo.
Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.
Romanos 12:1-3 RVR 1960
En otra traducción o versión dice,
Por lo tanto, amados hermanos, les ruego que entreguen su cuerpo a Dios por todo lo que él ha hecho a favor de ustedes. Que sea un sacrificio vivo y santo, la clase de sacrificio que a él le agrada. Esa es la verdadera forma de adorarlo. No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la cual es buena, agradable y perfecta. Basado en el privilegio y la autoridad que Dios me ha dado, le advierto a cada uno de ustedes lo siguiente: ninguno se crea mejor de lo que realmente es. Sean realistas al evaluarse a ustedes mismos, háganlo según la medida de fe que Dios les haya dado.
Romanos 12:1-3 NTV
Amados, las tentaciones vendran. Las malas alianzas estarán cerca, tratando de encontrar cavida en nosotros.
El diablo busca como león rugiente a quien le puede ser fácil presa.
Por lo cual, Pablo escribio, y lo puso muy claro…
En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad. Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.
Efesios 4:22-26, 28-32
La calve esta en buscarle primero. Enfocarnos en Dios cada mañana. Sabemos que sus misericordias son renovadas cada mañana.
Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré. Salmo 5:3
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. S. Mateo 6:33
Buscándole de mañana nos ayuda a permanecer en El. Nos da el poder para renovar la mente y desechar los deseos de la carne bajo nuestros pies. Nos ayuda a vencer contra el enemigo satanas y también a nuestro propio viejo hombre.
Su Palabra nos educa, nos prepara, nos capacita, nos protege para que no caigamos en la tentación.
Lo hermoso que vemos de Dios, en el Antiguo Testamento, tanto, como el el Nuevo, es que Dios, se compadece de los que se humillan. Dios tiene misericordia de los que reconocen su pecado. El mira de lejos al altivo, más se compadece de el que sabe que a pecado y se arrepiente. (Salmo 138:6)
Así, Paso con David. David cuando el profeta Natan le confronto y le enseño su pecado. David se humillo. Se arrepintió. Sintió dolor y entendió la vergüenza que le trajo al nombre de Jehová. David entendió que sus decisiones ofendieron a Dios y que tendrían consecuencias.
Dios, si, le castigo pero, no le condeno a muerte. Dios tuvo misericordia de su vida. A pesar de que el hijo que tuvo con Betsabe nacio, ese mismo, murió.
Dios tiene misericordia de los contrito y humillados. Al arrepentirse David, siguió y aun esta en la genealogía de Jesús.
Dios, no lo descarto.
Así también con nosotros, cuando fallamos, Dios es Dios, de restauración y de misericordia. Al que se humilla Él lo levanta.
Leamos el en el Salmo 138,
6 Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, mas al altivo mira de lejos.
7 Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás;
Contra la ira de mis enemigos extenderás tu mano, y me salvará tu diestra.
8 Jehová cumplirá su propósito en mí;
Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre;
No desampares la obra de tus manos.
Cuando David reconoció su pecado, aun antes del tiempo de ‘La Gracia,’ estaba la misericordia de Dios manifestándose.
Mire como se arrepintió David, su plegaria es una lección vigente para nosotros hoy.
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio y renueva un espíritu fiel dentro de mí. No me expulses de tu presencia y no me quites tu Espíritu Santo. Restaura en mí la alegría de tu salvación y haz que esté dispuesto a obedecerte. Entonces enseñaré a los rebeldes tus caminos, y ellos se volverán a ti. Perdóname por derramar sangre, oh Dios que salva; entonces con alegría cantaré de tu perdón. Desata mis labios, oh Señor, para que mi boca pueda alabarte. Tú no deseas sacrificios; de lo contrario, te ofrecería uno. Tampoco quieres una ofrenda quemada. El sacrificio que sí deseas es un espíritu quebrantado; tú no rechazarás un corazón arrepentido y quebrantado, oh Dios.
Salmos 51:10-17
El entendió, que ningun ritmo o sacrificio externo deseaba Dios. El comprendió que Dios busca corazones conforme al suyo.
Jesús se entregó a lo sumo. El se humillo a la más alta expresión. Entrego su vida para que nosotros también entendamos. Dios buscas corazones que le amen y le busquen en espíritu y verdad.
Corazones de aquellos que reconocen sus obras de maldad y se vuelven a Dios.
Jesús, se entregó y murió como pecador, tomando en si mismo tus pecados y los míos.
El fue el sacrificio perfecto. Ya no hay nada más que podamos ofrecerle.
Pero Dios anhela tener comunión con nosotros.
El no nos hechura fuera si nos volvemos a él.
Él solo puede Salvar, Restaurar, Sanar, Dándonos una nueva vida.
Así como hizo con la mujer adultera, que le devolvió su dignidad y le sano de su debilidad. Así hará Dios contigo y conmigo.
No Se complace en castigar.
Diles: Vivo yo, dice Jehová el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos; …”
Ezequiel 33:11
Aunque esto fue escrito para Israel. Hoy esta Palabra es para ti y para mi también.
El Señor nos llama a volver al Camino.
El no es una ruta.
El nos lleva directamente al Padre. El no es una manera de vivir.
El Es La Vida.
Solo En Cristo tenemos Perdón de pecados y Reconciliación con El Padre y La Vida Eterna.
Esa mujer y también David recibieron perdón por su humillación.
No negaron su pecado. No se esquivado mintiendo. No le pusieron excusas. Solo se entregaron y se humillaron y recibieron Misericordia.
Hoy, él Señor nos invita que si, hemos fallado volvamos a Él. Si le hemos olvidado volvamos a verle y a contemplar su gran amor.
No hay mejor lugar Que el estar en Cristo y obtener su misericordia.
Renovaos, Restaurados sean todos.
Así, desea el Señor.

Esto lo tengo por cierto, pues, Am Mi Me Perdono También.

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